miércoles, 3 de julio de 2013

Muchos atentados se han perpetrado con minibombas nucleares


El terrorismo nuclear forma parte del panorama mundial desde hace décadas. Según Daniel Estulin, muchos atentados que fueron presentados como resultado de bombas convencionales se perpetraron en realidad con ayuda de minibombas nucleares.
Ha habido muchos ataques nucleares a lo largo de los años disfrazados de coches bomba y de terrorismo islámico. Empezando en Beirut, Líbano, en 1983, en los cuarteles de los marinos estadounidenses, o en la embajada egipcia en Pakistán en 1995", explica Daniel Estulin en su último programa en RT 'Desde la sombra', en el que también pasa revista a atentados como el de la calle Tarata de Lima, Perú, en 1992 o el coche bomba del club El Nogal en Bogotá, Colombia en 2003.

    Ha habido muchos ataques nucleares a lo largo de los años disfrazados de coches bomba y de terrorismo islámico  

Centenar de mujeres violadas en un solo día durante las protestas en Tahrir


La violación en grupo de una periodista holandesa en la plaza de Tahrir se suma al casi medio centenar de casos de abusos sexuales que tuvieron lugar en un solo día durante las protestas, según un grupo de defensa de los derechos de las mujeres.
El grupo Operation Anti-Sexual Harassment (@OpAntiSH), que fue organizado durante la primera ola de manifestaciones en Egipto, reporta que 46 mujeres fueron violadas en la plaza Tahrir durante las protestas del 30 de junio en El Cairo.
Durante las protestas de este lunes los activistas han documentado al menos 17 nuevos casos de abusos sexuales a mujeres. Sin embargo los activistas subrayan que la cifra incluye solo los casos denunciados al grupo, e insisten en que el número real de violaciones es superior.
“OpAntiSH ha observado casos de ataques físicos con palos contra las mujeres por parte de hombres en la entrada y la salida de la estación de metro Sadat, y ha recibido información de que mujeres han sido secuestradas en vehículos”, dicta un comunicado de la organización.
Los activistas denuncian que la violación sexual, principalmente en forma de abusos en grupo, se ha convertido en una plaga que afecta la plaza Tahrir durante las protestas políticas.