
Son 31 agentes qu cometieron robos,asaltos etc,ay exagentes
los que
se encuentran en el sector de observación, con capacidad para 60
internos, alejados de otros bloques por precaución. En un momento dado,
la cifra de agentes recluidos llegó a 42, pero con el transcurrir del
tiempo varios recuperaron su libertad.
Anteriormente, en Tacumbú
no se recibía a policías. Según establece la Ley Orgánica 222 de la
Policía, todo uniformado involucrado en un hecho delictivo debe guardar
reclusión en una dependencia policial, que en la práctica es la
Agrupación Especializada, por considerarse de máxima
seguridad,
salvo que un juez disponga otro sitio. El que marcó jurisprudencia en
este sentido fue el caso del agente Osmar Darío González Caballero,
sindicado como supuesto violador serial, según el director del penal,
Artemio Vera.
SUPERVIVENCIA. Eladio Gómez Almada, exsuboficial de
Villarrica, fue condenado a 10 años por un caso de robo agravado en el
2005.
A 15 días de ingresar en la cárcel, trabajó como mozo en el
penal. Durante dos años se desempeñó en esa tarea, pero ante la
necesidad de ayudar a su familia, que quedó en su pueblo natal, decidió
estudiar electricidad y actualmente es instructor en técnico en
electricidad.
Para tener más ingresos y solventar gastos de la
escuela y colegio de sus hijos, se animó a colocar un puesto de comidas
en uno de los pasillos de Tacumbú, cuya población hasta el pasado
viernes llegaba a 3.890 internos.
En sus ratos libres acude al
gimnasio, en uno de los bloques de la cárcel, y luego lee la Biblia
para fortalecerse espiritualmente y así sobrellevar las vicisitudes que
se atraviesan estando tras las rejas, señaló.
“Nunca faltaron las
amenazas por mi condición de expolicía. Los muchachos te miraban mal,
pero tenía que cuidarme. Todo porque quiero recuperar a mi familia,
conseguir un trabajo y reinsertarme en la sociedad”, señaló.
“Es bueno seguir a Dios. Mi familia y él me sostienen porque si la vida es dura afuera, acá es más difícil”, expresó.
El
mismo fue condenado inicialmente a 9 años de cárcel, pero el Tribunal
de Apelaciones anuló el fallo y dispuso un nuevo juicio oral.
Casi
8 años está purgando del total de la pena, dijo el exagente, quien
forma parte de la mayoría de suboficiales que están recluidos en
Tacumbú.