El presidente Horacio Cartes
defendió el proyecto de responsabilidad fiscal y sacó en cara a sus
correligionarios que presionan por cargos y amenazan con no prestar el
acuerdo constitucional a su director de Itaipú, James Spalding. En
conversación exclusiva con ÚH y Telefuturo, tras la Cumbre de la Unasur
que se llevó a cabo en Paramaribo, Surinam, el mandatario manifestó que
prefiere no llegar a tener que establecer un acuerdo político para
aprobar el proyecto de ley de responsabilidad fiscal. Sobre el combate
contra el Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), remarcó que no siente que
tenga un superpoder con la modificación de la Ley 1337 de Defensa y
seguridad interna.
- El tema de la ley de responsabilidad, ¿es fundamental observando los gastos del Gobierno?
- Hay que entender que el presidente de la República es el administrador general de los bienes del Estado. Nosotros (como Gobierno) no hemos hecho una petición por ocurrencia. Hemos invitado a los legisladores donde hemos mostrado los distintos presupuestos generales de los años anteriores, sobre todo el del 2013 donde claramente los números demuestran que, a pesar de tener un crecimiento récord en el Producto Interno Bruto, estamos con uno de los mayores déficits fiscales. Entonces, es mi responsabilidad pedir algo que, entiéndase bien, no es para el presidente o partido político, sino para las próximas generaciones. Queremos buscar recaudar más, hacer un negocio patriota, honesto, buscar el bienestar de las familias paraguayas que es la doctrina de mi partido. ¿Dónde están nuestros discursos de que queremos una atención a la tercera edad o que realmente queremos atacar la pobreza extrema si al final aprobamos más presupuesto de lo que podemos aguantar?
- Los congresistas invocan la potestad del Legislativo. Consideran que se les restará poder y que es inconstitucional el planteamiento.
- Francamente creo que es un tema importante y merece que lo debatamos públicamente. Debemos ir a los medios y explicar lo mismo que le hemos explicado a ellos (a los parlamentarios). Debemos explicar por qué queremos esa disciplina fiscal. No es que el Ejecutivo está haciendo la ley, sino que a quienes hacen las leyes les estamos pidiendo una ley que beneficie a los paraguayos. Ese fue el pedido que le hicimos. Dijimos lo público en público, vamos a intentar recaudar más con menos gastos y procurar que llegue más a la gente. Me siento en la obligación de pedir eso. No creo que nuestro planteamiento sea inconstitucional (por la ley de responsabilidad fiscal)... es una figura que la quiero mucho más que a un pacto político. Esto último supone armonía para dos años pero cuando comienzan las elecciones, vuelve la vieja práctica de “toma esto a cambio de esto” lo cual nos llevó a lo que hoy vivimos.
- ¿Es una salida intermedia un acuerdo político tal como señala el vicepresidente Afara? Ahora las bancadas están divididas tanto en la ANR como en el PLRA.
- Gané unas elecciones con el apoyo de mi querido Partido Colorado y de otra gente, comprometiéndome a hacer un gobierno para todos. Realmente si tengo que perder en votos no quiero perder ese compromiso y mi identidad que he hecho con el pueblo y la gente más carenciada, con la gente de la tercera edad, los recién nacidos. Sé perfectamente que si seguimos aprobando más de lo que recaudamos los discursos serán estériles y francamente prefiero demostrar que pensamos diferente. Creo que el debate hace muy bien a todos. Voy a insistir y recordar que quiero ser el mejor colorado. Para mí trabajar y buscar el bienestar de todos los paraguayos es una bandera que no puedo cambiar a cambio de acuerdos. Los acuerdos me tienen otro significado. Todo lo que estoy pidiendo es coherencia para cumplir con algo con lo cual estábamos todos de acuerdo. ¿Por qué no me cuestionaban antes? ¿Por qué no me cuestionaban en campaña? El nuevo rumbo era llegar a toda la gente. Hoy proponen un pacto antes que una disciplina. Lo único que pedimos es una disciplina para poder llegar a toda esa gente. Es una bandera de la cual no me quiero bajar, porque es un compromiso que tuvo mucho que ver para la victoria del mes de abril.
- Hay que entender que el presidente de la República es el administrador general de los bienes del Estado. Nosotros (como Gobierno) no hemos hecho una petición por ocurrencia. Hemos invitado a los legisladores donde hemos mostrado los distintos presupuestos generales de los años anteriores, sobre todo el del 2013 donde claramente los números demuestran que, a pesar de tener un crecimiento récord en el Producto Interno Bruto, estamos con uno de los mayores déficits fiscales. Entonces, es mi responsabilidad pedir algo que, entiéndase bien, no es para el presidente o partido político, sino para las próximas generaciones. Queremos buscar recaudar más, hacer un negocio patriota, honesto, buscar el bienestar de las familias paraguayas que es la doctrina de mi partido. ¿Dónde están nuestros discursos de que queremos una atención a la tercera edad o que realmente queremos atacar la pobreza extrema si al final aprobamos más presupuesto de lo que podemos aguantar?
- Los congresistas invocan la potestad del Legislativo. Consideran que se les restará poder y que es inconstitucional el planteamiento.
- Francamente creo que es un tema importante y merece que lo debatamos públicamente. Debemos ir a los medios y explicar lo mismo que le hemos explicado a ellos (a los parlamentarios). Debemos explicar por qué queremos esa disciplina fiscal. No es que el Ejecutivo está haciendo la ley, sino que a quienes hacen las leyes les estamos pidiendo una ley que beneficie a los paraguayos. Ese fue el pedido que le hicimos. Dijimos lo público en público, vamos a intentar recaudar más con menos gastos y procurar que llegue más a la gente. Me siento en la obligación de pedir eso. No creo que nuestro planteamiento sea inconstitucional (por la ley de responsabilidad fiscal)... es una figura que la quiero mucho más que a un pacto político. Esto último supone armonía para dos años pero cuando comienzan las elecciones, vuelve la vieja práctica de “toma esto a cambio de esto” lo cual nos llevó a lo que hoy vivimos.
- ¿Es una salida intermedia un acuerdo político tal como señala el vicepresidente Afara? Ahora las bancadas están divididas tanto en la ANR como en el PLRA.
- Gané unas elecciones con el apoyo de mi querido Partido Colorado y de otra gente, comprometiéndome a hacer un gobierno para todos. Realmente si tengo que perder en votos no quiero perder ese compromiso y mi identidad que he hecho con el pueblo y la gente más carenciada, con la gente de la tercera edad, los recién nacidos. Sé perfectamente que si seguimos aprobando más de lo que recaudamos los discursos serán estériles y francamente prefiero demostrar que pensamos diferente. Creo que el debate hace muy bien a todos. Voy a insistir y recordar que quiero ser el mejor colorado. Para mí trabajar y buscar el bienestar de todos los paraguayos es una bandera que no puedo cambiar a cambio de acuerdos. Los acuerdos me tienen otro significado. Todo lo que estoy pidiendo es coherencia para cumplir con algo con lo cual estábamos todos de acuerdo. ¿Por qué no me cuestionaban antes? ¿Por qué no me cuestionaban en campaña? El nuevo rumbo era llegar a toda la gente. Hoy proponen un pacto antes que una disciplina. Lo único que pedimos es una disciplina para poder llegar a toda esa gente. Es una bandera de la cual no me quiero bajar, porque es un compromiso que tuvo mucho que ver para la victoria del mes de abril.
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